Al menos de los que yo he leído, estos son los primeros en mis preferencias:
No Picnic on Mount Kenya, de Felice Benuzzi
Es la historia verídica de cómo tres presos de un campo de concentración británico en Africa, durante la II Guerra Mundial, escapan del lugar sólo para intentar subir el Monte Kenya, la segunda cumbre más alta de ese continente. En el diario escrito por Benuzzi, quien fungió de líder de la aventura, se detallan todos los preparativos que hicieron en secreto durante meses, construyendo los piolets y crampones con los materiales más rudimentarios, su intrépido escape y su retorno al campo de concentración. Es una de las odiseas más memorables de todos los tiempos.
The Wildest Dream, de Peter y Leni Gillman
Es la biografía de George Mallory, el intrépido explorador británico desaparecido en el Everest en 1922. En años recientes se descubrió el cuerpo de John Irvine, su compañero en esa fatídica expedición, pero el de él nunca ha sido recuperado y siempre quedará una duda razonable de si fueron los primeros en lograr la cumbre. En la biografía conocemos detalles de una vida contradictoria, como su bisexualismo y su profundo amor por su esposa e hijos. También, su elevado nivel cultural, su formación como escalador. Los autores hicieron una investigación muy sucinta, pero sin caer en el amarillismo.
Into Thin Air, de Jon Krakauer
El clásico sobre la tragedia del Everest en el año 1996 es lectura obligatoria para cualquier amante del montañismo. Krakauer, periodista veterano, fue contratado por la revista Outside para hacer un reportaje sobre las expediciones comerciales al Everest. Lo paradójico es que le tocó a él mismo ser protagonista de su propio relato. El reportaje se convirtió en este libro, donde hace un retrato excelente de los malogrados líderes de las dos expediciones involucradas y de todos los participantes, así como de las acciones que desencadenaron en la peor tragedia del montañismo de los últimos años.
No Picnic on Mount Kenya, de Felice Benuzzi
Es la historia verídica de cómo tres presos de un campo de concentración británico en Africa, durante la II Guerra Mundial, escapan del lugar sólo para intentar subir el Monte Kenya, la segunda cumbre más alta de ese continente. En el diario escrito por Benuzzi, quien fungió de líder de la aventura, se detallan todos los preparativos que hicieron en secreto durante meses, construyendo los piolets y crampones con los materiales más rudimentarios, su intrépido escape y su retorno al campo de concentración. Es una de las odiseas más memorables de todos los tiempos.
The Wildest Dream, de Peter y Leni Gillman
Es la biografía de George Mallory, el intrépido explorador británico desaparecido en el Everest en 1922. En años recientes se descubrió el cuerpo de John Irvine, su compañero en esa fatídica expedición, pero el de él nunca ha sido recuperado y siempre quedará una duda razonable de si fueron los primeros en lograr la cumbre. En la biografía conocemos detalles de una vida contradictoria, como su bisexualismo y su profundo amor por su esposa e hijos. También, su elevado nivel cultural, su formación como escalador. Los autores hicieron una investigación muy sucinta, pero sin caer en el amarillismo.
Into Thin Air, de Jon Krakauer
El clásico sobre la tragedia del Everest en el año 1996 es lectura obligatoria para cualquier amante del montañismo. Krakauer, periodista veterano, fue contratado por la revista Outside para hacer un reportaje sobre las expediciones comerciales al Everest. Lo paradójico es que le tocó a él mismo ser protagonista de su propio relato. El reportaje se convirtió en este libro, donde hace un retrato excelente de los malogrados líderes de las dos expediciones involucradas y de todos los participantes, así como de las acciones que desencadenaron en la peor tragedia del montañismo de los últimos años.
4 comentarios:
Hola Aurora!
De nuevo disfrutando el visitarte.
Saludos.
Jose�n.
Hola aurora espero estes bien. tu blog esta bien interesante, llegue a el por casualidad,espero no te intimides pero tambien trabajo en esa empresa donde tu trabajas en el centro, me alegro que haya entrado en ella una persona tan culta y con tanto que decir como tu, aunque el 90% de los que trabajan alli no aprecia eso, ojala todos pudiesen conocer tu blog y llenarse de cultura un poco. Felicidades.
PD: no seas tan seria en los pasillos.
Gracias, Josein! Bienvenido!
Gracias, Carlos, ¡bienvenido a mi blog!
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